Sobreponerse a la adversidad
Filmada en la provincia de Entre Ríos, la "opera prima" de Mario Pedernera es una película que derrocha humanidad y muestra la tenacidad de un hombre que se sobrepone a una trágica circunstancia y decide emprender una nueva vida.
"Pies en la tierra" es una "road-movie" con escasas palabras, sus personajes dicen solo lo necesario, pero lo que muestran las imágenes hablan de una serie de circunstancias, que hacen de una historia mínima algo conmovedor.
El protagonista es Juan, un joven de treinta y tres años que se mueve en silla de ruedas, vive con su madre en una zona de islas, en la provincia de Entre Ríos y todos los días, con la ayuda de algunos lugareños, es trasladado hasta una ruta cercana, en la que tiene un improvisado puesto de pescado, en el que vende, a los que detienen su auto frente a su puesto, las especies que le trae un muchacho en bicicleta.
LA RUTINA
La vida para Juan transcurre rutinariamente. A la noche regresa a su casucha de madera. Su madre cocina y comen juntos, hablan unas breves palabras antes de irse a dormir y es toda la comunicación que tienen. Pero un día todo cambia y cuando Juan llega encuentra a la mujer muerta.
La ayuda que recibe de la gente de campo, acostumbrada a ser solidaria con los más desvalidos, le permiten superar, en parte el dolor por la pérdida.
Lo que viene después es el rotundo cambio que Juan decide hacer en su vida. Sólo y con su silla de ruedas se traslada a la ciudad de San José, cerca de Colón, a encontrarse con su prima y su sobrina.
Los pintorescos personajes con los que se encuentra a lo largo del trayecto, le aportan no sólo emoción y color a esta película, excelentemente actuada por Francisco Cataldi (Juan) y un inigualable Carlos Belloso, en el papel de un típico cantante popular.
"Pies en la tierra" propone una historia mínima, bien contada, que habla de un hombre que ante la adversidad decide no rendirse y asumir la vida en totalidad.