Detective Pikachu es una propuesta infantil que apunta a entretener principalmente a los espectadores más chicos, a partir de los cinco años, a través de un espectáculo que funciona bastante bien.
Para los adultos que acompañen en la sala cada tanto hay alguna referencia humorística que puede resultar graciosa, pero en general es una película pensada para los niños. Cabe destacar que la historia no es una adaptación del popular animé sino del video juego homónimo que salió a la venta en el 2016.
Por consiguiente, si tenemos en cuenta que esta interpretación hollywoodense de los personajes de Pokémon tranquilamente podría haber seguido el camino de Alvin y las ardillas el resultado final es más que decente.
Hay que darle el crédito al director Rob Letterman (Escalofríos) por la intención de hacer algo diferente en lugar de seguir las fórmulas que se utilizan en este tipo de filmes.
Detective Pikachu tiene un comienzo muy sólido y encuentra su mayor fortaleza cuando el relato de Letterman introduce elementos del género policial.
Sin olvidarse de ser una propuesta infantil, la narración de la trama juega con algunas características clásicas del cine noir que inclusive cobran fuerza en la puesta en escena. Muy especialmente en lo referido a la fotografía con tonos oscuros y azulados y la iluminación de las escenas nocturnas.
La presentación del mundo Pokémon está bien construida y en la primera mitad del film encontramos los mejores momentos de la historia.
Justice Smith, quien apareció en la última entrega de Jurassic Park, interpreta a un protagonista afable que representa un poco el punto de vista de los espectadores que desconocen este mundo de ficción.
El casting de Ryan Reynolds como Pikachu por otra parte genera sensaciones encontradas. Si bien tiene algunos momentos graciosos, su labor transmite la impresión que Deadpool pegó un trabajo como actor de voz y en ocasiones eso genera una distracción. Sin embargo con el desarrollo de la trama el director logra que funcione dentro del contexto del film.
Reynolds, quien está destinado a quedar encasillado de por vida con el personaje de Marvel, se nota que en algunos momentos apeló a la improvisación para entretener un poco a los adultos, algo que se agradece.
Esta producción pierde paulatinamente su atractivo a partir de la segunda mitad de la trama, cuando Letterman deja de jugar con el género policial para desarrollar una propuesta pochoclera más genérica.
Inclusive para el público que no tiene ninguna conexión nostálgica con esta franquicia la película podría resultar un poco aburrida debido a su marcado tono infantil.
Pese a todo, es justo destacar que Pikachu tiene momentos heroicos más sólidos que Shazam, en secuencias de acción que cuentan con una elaboración superior.
En resumen, para los más chicos es una apuesta segura con la que pasarán un gran momento en el cine.