EL VIEJO TRUCO
Laird (James Franco) se hizo millonario diseñando viedeojuegos, Ned (Bryan Cranston) tiene una empresa gráfica y le va cada vez peor porque ya nadie imprime nada. El muchacho es irreverente y está locamente enamorado de Stephanie (Zoey Deutch), la hija de Ned, así que hay que juntar a los dos opuestos, entonces la chica invita a sus padres para que conozcan al desbordante Laird, que habla sin filtro, putea, mete la pata con ganas pero bueno, es simpático y quiere mucho, pero mucho a Stephanie.
La película transcurre por los carriles esperables, esto es, dos tipos bien diferentes, separados geracionalmente y sobre todo, por la disputa del amor de la chica en cuestión, se van a odiar, se generarán momentos incómodos, el choque de mundos tendrá sus momentos más o menos divertidos y al final, se darán cuenta que son más las cosas que los unen que las que los separan, etcétera.
El director John Hamburg es el mismo de Mi novia Polly y Te amo, hermano pero sobre todo, guionista de películas como Zoolander y La familia de mi novia. Y si, de esta último título es de donde saqueó la historia para este Frankenstein, una película que se sostiene por el carisma y el desborde de Franco (un poco pasado de rosca), el balance que establece el oficio de Cranston y un puñado de gags divertidos pero que la mayoría de las veces se extienden demasiado -las referencias al inspector Clouseau y su sirviente Cato de La pantera Rosa están absolutamente desaprovechadas, tanto como la como la presencia de Kiss-. Y si a todo esto se le suma la moralina que atraviesa todo el relato y que se acentúa hasta límites insoportables al final, el resultado es el de una comedia que pudo ser efectiva pero que se quedó a medio camino.
¿POR QUÉ ÉL?
Why Him?. Estados Unidos, 2016:
Dirección: John Hamburg. Intérpretes: James Franco, Bryan Cranston, Zoey Deutch, Megan Mullally, Griffin Gluck, Keegan-Michael Key, Adam Devine, Zack Pearlman, Casey Wilson y Cedric the Entertainer. Guión: Ian Helfer y John Hamburg. Fotografía: Kris Kachikis. Música: Theodore Shapiro. Edición: William Kerr. Diseño de producción: Matthew Holt. Duración: 111 minutos.