Una de las mejores películas del año, por mucho. Es la historia de la amistad entre dos adolescentes que se ve interferida por un conflicto entre los padres de uno de ellos y la madre del otro.
El problema es económico, pero también es un asunto de clase o de lo que cierta clase media ve de sí misma. Sin embargo, lo más importante de la película consiste en cómo el punto de vista adolescente implica un equilibrio que permite una mirada de mayor inteligencia sobre el problema que generan los adultos. El placer
está en la realización, en la construcción de personajes en los que podemos creer, en el humor que se cuela entre las situaciones, en cómo los actores son parte integral de un paisaje que sólo puede ser
mostrado por el cine. Como en muchas grandes películas, la amistad es una especie de refugio contra las tristezas del mundo. Una belleza al mismo tiempo original.