Basada en una historia real, narra como una familia debe unirse para sobrevivir ante el ataque del mal.
Existe una leyenda de la caja Dibbuk que se remonta a finales de la Segunda Guerra Mundial, cuando fue encontrada en España por un sobreviviente del Holocausto polaco. El sobreviviente fallece en el 2001, desde ahí se fue vendiendo a diferentes compradores, todos ellos padecieron el mal. Este film se basa en un hecho real cuando una familia se encuentra amenazada por este espíritu maligno.
Las películas basadas en hechos reales le dan un estilo distinto y más aun si tienen un toque de terror. Todo lo que vemos en pantalla nos impacta por el simple hecho que contienen cierto realismo y tan solo con pensar que esto realmente le sucedió a alguien nos provoca un mayor tensión.
Cuenta la historia de una matrimonio con dos hijas adolescente, ellos acaban de separarse hace unos tres meses, su ex Stephanie (Kyra Sedgwick “Al borde del abismo”) ahora se encuentra de novia con Brett (Grant Show ), porque su esposo Clyde (Jeffrey Dean Morgan –“Posdata, te amo”; “Watchmen - Los vigilantes”) vivía ausente solo le interesa su trabajo como entrenador, ahora comparten a sus hijas: Em ( Natasha Calis trabajo en la serie de TV “The Firm” ) y Hannah (Madison Davenport- en “Vecinos invasores” le dio la voz a Quillo).
Él lleva a su nueva casa a sus hijas por unos días, es un lugar hermoso, donde piensan pasar momentos felices. Le da todos los gustos a ambas, y una mañana se detienen en el garaje de una casa y compran algunas cosas usadas. Em se siente atraída por una caja de madera que está tallada con un mensaje en hebreo. A partir de ese momento comienzan a suceder situaciones extrañas, Em se siente muy cautivada por dicha caja, ya no es la misma, comienza a escupir polillas, se encuentra malhumorada, come con ansiedad. Muestra un apego obsesivo con la caja, que se encuentra poseída por un antiguo espíritu. Ahora su padre intentará rescatarla y la única ayuda que conseguirá es un rabino Tzadok un conocedor de los Dibbuk.
Una película que hizo historia dentro del género fue “El Exorcista (1973)”, esta tiene cierta similitud pero el espíritu maligno es judío. Su relato es clásico, aquí contiene buenos efectos, ayuda mucho su iluminación y maquillaje. Algo acertado es la no utilización de la cámara en mano. Intenta mantener a los espectadores pegados a las butacas, consiguiendo algunos buenos sustos e intriga, y queda abierta para una segunda parte.