La búsqueda de una película que no existe, episodios cortos de humor extremo y la sorpresa de grandes nombres que se atreven a la diversión de munición gruesa, pero en este caso casi siempre desopilante y creativa. Ver a Hugh Jackman con genitales masculinos en la garganta frente a la atónita Kate Winslet o a Halle Berry bizarra supecirugeada es sólo una muestra de lo que trae el film.