Tres historias de amor convergen en “Quizás Para Siempre”. Una escena de hotel, un encuentro en un cine, una propuesta de matrimonio. Si vimos antes el trailer, ya sabremos (y es probable de antemano) que las historias estarán entrelazadas. Lo previsible no es menos disfrutable a medida que repasamos el ilustre elenco que aquí se congrega: Diane Keaton, Susan Sarandon, Richard Gere, William H. Macy y Emma Roberts garantizan la calidad actoral del producto. Aún hay mercado para este tipo de cintas y estrellas veteranas dispuestas a no desvanecer por completo. Las subramas atan cabos, si bien vemos venir el desenlace. Lo cursi y lo edulcorado van de la mano a través de conversaciones íntimas reveladas de modo tragicómico. Podrían cuestionarse ciertas reacciones inverosímiles; hay parejas que no vuelven de determinada situación, no obstante, el film elige el tono liviano a lidiar con las consecuencias sentimentales. Lo grave es tomado desde el absurdo, bajo la perspectiva de un Michael que Jacobs escribe y dirige este abordaje coral romántico, con cierto dejo del abordaje que solía hacer Garry Marshall, pero bajo una fórmula mucho más simplista. Más placer inofensivo que culposo inclina la balanza a la hora de ejecutar una mirada sobre el matrimonio, el sexo y el compromiso a largo plazo.