Con mucho más humor y menos explicaciones, estos grandes actores de siempre vuelven a jugar a los superespías retirados. Ahí está Bruce Willis y ahí está John Malkovich, pero sobre todo está una de las mejores actrices de la historia y de las que menos se ha tomado en serio, la enorme Helen Mirren. El film mejora muchas cosas del anterior y, como ya había hecho su director Dean Parisot en la no estrenada pero excelente Héroes fuera de órbita, construye lazos humanos a partir de la pura aventura.