A través de primeros planos que nos enfrentan con cada personaje y sus palabras, y un narrador que nos guía por sus acciones; la película nos lleva por la dinámica familiar de Gregorio (Marcelo Zygier) con Juana (Jenni Merla), su mujer, y su perro Tom.
El filme inicia con un reconocimiento a la directora belga Chantal Akerman, a quien admite no llegarle ni a los talones. Pero con un resultado tan magullado, es difícil ver la referencia y no distraerse con los detalles, sobre todo las actuaciones lánguidas y la narración reiterativa. El gran problema de la película es su manera de retratar tal dinámica a través únicamente de primeros planos. Éstos desnudan las pobres actuaciones por parte de todo el elenco; pobres puesto que parecen obligados a estar adormecidos mientras dicen sus diálogos. Los primeros planos los limitan en vez de detallar sus matices y explorar la variedad de sentidos que hay, incluso, en la miseria y el absurdo. Un primer plano sostenido como secuencia puede ser muy enriquecedor, como en el caso de la escena de la carta en una película como Luz de invierno (1963), y su efecto en solitario es tan poderoso como el resto de la película, pero hay que saber cuándo cortar. Y esto le falta a Reemplazo Incompleto, más agudeza para extraer lo que sobra.
Además, la manera de narrar en voz todas las acciones menos los diálogos reduce las posibilidades del guión. El aburrimiento arremete ante tanta narración omnisciente, aún a pesar de la breve duración del filme, apenas 62 minutos.
La historia está filmada en Súper 8 mm. Esta textura de la imagen le brinda un tono de improvisación a las secuencias, de estarse preparando para algo mayor que nunca termina de ocurrir porque Gregorio siempre está compensando sus errores con errores aún mayores. Y así, todo transcurre entre fallos que parecen no ser más que comunes y corrientes detalles.
Por su parte, la música, un tanto desordenada en sus sonidos, recuerda a ratos a las notas de Birdman. (2014). Tal asociación hace pensar por un momento en que todos se merecían un mejor resultado. Hay momentos donde el concepto reluce por lo que pudo ser: una propuesta a reflexionar sobre el absurdo mundo contemporáneo que busca consumir soluciones desesperadas y distanciadas ante el sufrimiento.