La Dama de las Espadas llegó al país para seguir con su sangrienta venganza. "Reflejos Siniestros" es una película de terror sobrenatural rusa dirigida por Aleksandr Domogarov Jr. y protagonizada por Angelina Strechina, Daniil Muravyev-Izotov, Vladislav Konoplyov, Claudia Boczar e Igor Yashanin.
Antes de comenzar con la crítica cabe recalcar que "Reflejos Siniestros" es parte de una secuela rusa y la primera nunca llegó al país. Igualmente no es necesario haberla visto para ver esta, son películas distintas con un mismo eje central: La Dama de las Espadas. Ahora si continuemos.
Quizás la mayoría de nosotros teníamos un poco de fe sobre la película ya que al ser una producción rusa no caería en los clásicos clichés de terror de cuales estamos acostumbrados. Pero estábamos equivocados, la historia es repetitiva y con un guión bastante pobre. Todo comienza con un accidente de auto en donde la madre de Olga y Artyom muere para salvarlos. A raíz de ese suceso nuestros jóvenes protagonistas caen en un internado, muy frío y sombrío, donde el pequeño Artyom empieza a tener contacto con un supuesto espíritu que dice ser su madre. El pequeño es manipulado por el espíritu, entonces Olga y sus nuevos amigos persiguen a Artyom hasta llegar a un sótano, profundo y prohibido que guarda un espejo donde a través de un juego invocan a la dama para pedir un deseo, pero lo que no saben es que el espíritu se los llevará a cambio.
Luego de todo lo sucedido no es muy difícil adivinar lo que sigue, desapariciones, muertes, sangre. Las explicaciones son confusas y tediosas, aunque da lo mismo, porque el camino es conocido de antemano. El hilo de la historia no deja el espacio para que el espectador vaya armando una historia ya que las respuestas son fáciles de encontrar. Los recursos de mundos paralelos ya los hemos visto anteriormente y no es algo que sobresalga ya que solo está un momento de la película. El final también es bastante predecible pero puede dar paso a otra entrega.
Lo que rescato del film es la colorimetría. Con tonos fríos y cálidos el director pudo realizar una buena forma de contar la historia y algunos montajes llegaron a generar un clima de suspenso pero no del todo sostenido. La fotografía en general se puede decir que fue buena y pudo acompañar muy bien a la cinta.
Quizás es un poco cansador que el cine ruso no se atreva a arriesgar con sus propias fórmulas para generar terror y suspenso, ya que tienen historias y leyendas propias que pondrían piel de pollo a cualquier espectador. Se derrocha el presupuesto en una película típica americana que no hace más que opacar al cine de terror que uno tanto ama.
Por Keila Ayala