"Familia vs. Sueños"
Con Meryl Streep a la cabeza, “Ricki & the Flash” cuenta la vida de Ricki Rendazzo, una guitarrista y cantante de rock que dejó su familia de lado para triunfar en el mundo de la música. Sin embargo, debe volver a casa para apoyar a su hija (Mamie Gummer) que acaba de separarse. Esta será su última oportunidad para redimirse y recuperar el tiempo perdido.
En primer lugar cabe destacar la labor de Meryl Streep, actriz ya consagrada en el mundo del espectáculo y que no deja de seguir sorprendiendo. Si bien no es el mejor papel que le tocó interpretar, en “Ricki & the Flash” no solo muestra sus dotes actorales, sino que se desempeña muy bien en el escenario cantando, como pudo demostrar en otras oportunidades como en “Mamma Mia” o “Into the Woods”, pero esta vez cantando en vivo.
Asimismo, se encuentra muy bien acompañada por el resto del elenco: Mamie Gummer (hija en la vida real de Mery Streep, lo que permite una gran química entre ambas), Sebastian Stan y Nick Westrate, quienes hacen de sus hijos; su ex marido Pete (Kevin Kline) y la banda The Flash, liderada por su guitarrista Rick Springfield, músico en la realidad.
La trama se torna un poco predecible a medida que va avanzando y tal vez se podría profundizar aún más la relación de Ricki con sus hijos (sobre todo con los dos varones), pero aun así logra poner en el tapete la dificultad de ser mujer y buscar perseguir un sueño personal, mientras que se debe criar a una familia, y que un hecho no suplante al otro. Pero no siempre se puede y a veces hay que elegir entre los sueños o la familia.
Sin embargo, el punto fuerte de “Ricki & the Flash”, que va más allá de la trama que es un tanto simple, es la música y las presentaciones en vivo de Meryl Streep y los integrantes de la banda, quienes interpretan canciones de rock y algo de pop para los más jóvenes, como “American Girl”, “Drift Away”, “Bad Romance” o “My Love Will Not Let You Down”.
En síntesis, con buenas interpretaciones y performances de grandes canciones, “Ricki & the Flash” nos dará un momento de entretenimiento muy grato.
Samantha Schuster