Música rejuvenecedora
Cálida película sobre cuatro músicos de óperas retirados y sus confrontaciones, las cuales son aumentadas al ser solicitados a cantar su famoso fragmento de Rigoletto para salvar la casa dónde se hospedan. Debut como director de Dustin Hoffman quien con mucha habilidad dirige a un brillante elenco de actores, pero lamentablemente no consigue un gran labor en la narración de la historia. No obstante, "Rigoletto en apuros" logra ser una película muy simpática y agradable.
Lo primero que uno se da cuenta al empezar la película, es el muy eficiente y delicado balance entre la comedia y el drama donde si bien las desgracias de los habitantes de la peculiar casa son reflejados con mucho respeto, al tratarlas de manera burlona o sarcástica, la situación es sutilmente encantadora. Así es como aparecen gruñones, pícaros, olvidadizos, atorrantes o manipuladores. Toda la casa podría ser un caos pero ante cada exabrupto los diversos personajes se toman la situación con gracia y lo dejan pasar. Por lo tanto, desde el inicio el espectador es introducido en un lugar amable y disfrutable.
No obstante, al haber tanta tranquilidad o sutileza cuando surgen inconvenientes bastante graves como rupturas románticas, problemas económicos o incluso muertes, los temas se vuelven casi insignificantes. Por lo tanto, la cuestión dramática no genera preocupación en el espectador, la película se vuelve monótona y las escenas pierden emotividad. Incluso, el homenaje a varios músicos de la vida real colocándolos en la película al darle momentos donde demuestran su envidiable talento, aunque es muy deleitable, perjudica a la trama en su empatía con el espectador, al desviarse continuamente de sus protagonistas o conflictos principales.
En definitiva, a pesar de ser un relato afectivo y simpático, las mismas razones que hacen a la película agradable, también le impiden explotar todo su potencial. El nivel de talento impuesto en su concepción es tan envidiable como decepcionante ante el resultado de la obra.