Ante la noticia de que Kick-Ass 2 no verá la luz en los cines de Argentina, uno no puede más que sorprenderse de que la misma distribuidora haya priorizado estrenar R.I.P.D., una adaptación de un cómic poco conocido –no solo en nuestro país, sino que también en el de origen- centrada en una pareja despareja y protagonizada por actores populares, al igual que los es 2 Guns, película que tiene su salida comercial el mismo día. Se trata, nada más y nada menos, que del fallout de la explosión en torno a las transposiciones de historietas al cine, la lluvia de partículas generada tras el boom del género en la pantalla grande. Al igual que Bullet to the Head, otro notorio fracaso, suponen la búsqueda por parte de los estudios de propiedades novedosas, fuera de los universos de Marvel o DC Comics, capaces de disparar nuevas franquicias cinematográficas o de pegar en un público sediento de personajes nuevos. Pero como en el caso del terror found footage o del paso de novelas románticas/fantásticas para jóvenes adultos, no todas las producciones así pueden ser garantía de éxito.
Hay películas condenadas desde mucho antes de conocerse las primeras imágenes y es difícil que logren sacarse ese peso de encima. World War Z es la excepción a una regla que indica que la mala publicidad en torno a un tanque posiblemente lo lleve a la perdición. Y R.I.P.D. se cuenta entre estos últimos. Con un presupuesto estimado en 130 millones de dólares, es extraño que Universal Pictures haya comenzado su campaña publicitaria apenas tres meses antes del estreno comercial, cuando la producción había comenzado dos años antes. La compañía apostó por este producto de la editorial Dark Horse, pero pareció hacerse evidente que la plata estaba puesta en un caballo perdedor. Sin funciones de prensa para los críticos norteamericanos –con lo sensibles que estos son-, se buscó evitar que esta sea un fracaso en la crítica pero que igual tuviera solvencia en la taquilla. Nada de eso se logró, dado que hay quienes la han llamado la peor película de la historia y además resultó en un desastre comercial.
Lo que ocurre es que R.I.P.D. carece de méritos. Es entendible la convocatoria de Robert Schwentke como director, ya que él tuvo a su cargo RED (2010), otra comedia de acción basada en un cómic poco conocido que resultó en un éxito sorpresivo de recaudación y disparó una secuela, no obstante en este caso dista de tener un logro similar por ofrecer un producto que en ningún momento abandona la medianía. En primer lugar, una dupla carismática de protagonistas es clave. Denzel Washington y Mark Wahlberg en 2 Guns pueden venderme acciones en Blockbuster, algo que en ningún momento termina de generarse con Ryan Reynolds y Jeff Bridges. Valoro al primero por seguir intentándolo, a pesar de ser un probado pesticida para las adaptaciones –Green Lantern, X-Men Origins: Wolverine y van-, pero curiosamente el principal problema es respecto al segundo. Siendo que la última película que lo tuvo en pantalla fue la enorme True Grit, es imposible no notar el piloto automático con que el actor interpretó a su Roy, el cual remite permanentemente a Rooster Cogburn y no nos deja sumergirnos en su personaje. Hay química entre los dos y su vínculo funciona, pero no puede dejar de sentirse reciclado.
El guión de Phil Hay y Matt Manfredi, dupla cuyo prontuario incluye Æon Flux o Clash of the Titans entre otros delitos, es caprichoso y acomodaticio. Si bien tiene un material fuente en el cual sostenerse, este no es particularmente fuerte y ellos no hacen nada para apuntalar sus debilidades. Sus diálogos no son ingeniosos, los efectos no lucen para nada acordes a la inversión que se hizo, le falta comedia, acción de la buena y si a todo esto se suma la carencia de inspiración a la hora de entregar cada pasaje, el combo no aporta nada para ser algo irresistible. Sin ser un producto completamente malo, es llevadero y vistoso, tiene suficientes falencias como para justificar su suerte. Ninguno de los involucrados es capaz de dispersar el tufo a Men in Black del cual está cargada la película y ese es uno de los grandes errores, porque no es que van de la mano sino que R.I.P.D. está muchos cuerpos atrás. Es, lamentablemente, una confirmación de lo que tiempo atrás se suponía… que su destino ya venía explícito en el título.