Una de terror bien hecha. La tensión, el ambiente, la buena dirección de actores, el clima de suspenso bien llevado y un final desaforado. La historia de una familia muy normal, de apariencia bucólica que, arrastrada por un interpretación muy particular de sus creencias religiosas, esconde un terrible pecado. Mantiene la tensión aún cuando el espectador accede a verdades reveladas.