Román es una película un tanto particular y, definitivamente, una excepción en la filmografía argentina.
A priori, dejo bien en claro que no es un film para todo público. Pero estoy seguro de que esa era la intención de los realizadores.
Me gustó el concepto de superhéroe que tiene el personaje que lleva el nombre del título. Un policía incorruptible y con falencias, que busca justicia de una manera u otra.
El personaje está bien construido, con la información justa y necesaria. Y a su vez es bidimensional, lo que normalmente sería muy criticable, pero en este caso no lo es.
Gabriel Peralta Rangel encarna a Román sin muchos matices. Es alguien tosco y con gran presencia física.
Lo acompañan Nazareno Casero, Arnaldo André y Carlos Portalupi. Cada uno en un rol un tanto caricaturesco, en la misma línea que todo el film.
El director Eduardo Meneghelli hace un buen trabajo con los pocos recursos que tuvo, con una narrativa sólida y una identidad muy marcada. Es su ópera prima.
En definitiva, Román es un estreno chico, pero que tiene que ser tenido en cuento por quienes disfrutan de los superhéroes y los comics, que hoy en día es un público en crecimiento.