Clásico de todos los tiempos
Romeo y Julieta (Romeo and Juliet, 2014) traslada a la pantalla grande –una vez más- la historia de amor escrita por William Shakespeare. El director Carlo Carlei (La corsa dell'innocente, 1992) realiza una nueva versión protagonizada por Hailee Steinfeld y Douglas Booth.
La película relata la historia de amor y odio mundialmente conocida, que inicia cuando Julieta Capuleto (Hailee Steinfeld) y Romeo Montesco (Douglas Booth) se ven por primera vez en un baile en el que ella debía conocer al Conde Paris (Tom Wisdom), pretendiente impuesto por sus padres. Al pertenecer a familias enemigas, los amantes de Verona deben interponerse a la rivalidad heredada, desafío que intentarán superar con la ayuda y comprensión de Fray Lorenzo (Paul Giamatti).
La remake de Carlei, que entre sus antecesoras tiene a la inolvidable versión de Franco Zefirrelli y a la moderna de Baz Luhrmann (en la que se destacaron Leonardo DiCaprio y Claire Danes), es una adaptación fiel del argumento original, pero sin utilizar en su totalidad los diálogos poéticos de Shakespeare.
Como tal, se destaca en la misma el trabajo en la dirección de arte a través de grandilocuentes escenarios, fastuosas locaciones exteriores, y un acorde diseño de vestuario de época, para completar un film apenas correcto que no defraudará a los seguidores de las historias clásicas de amor.
La pareja protagonista, Steinfeld y Booth, cumplen con sus actuaciones aunque por momentos se evidencia una falta de “química” entre ellos. Por su parte Giamatti, sin dudas el mejor del elenco, logra a la perfección que su personaje transmita los diversos sentimientos que atraviesa.
Es probable que las nuevas generaciones se acerquen a este clásico de la literatura a través de la película. Y las que no lo son tanto, no se sorprenderán. Pero quizás, Romeo y Julieta sea la excusa para redescubrir una historia que jamás pasará de moda.