Un policial algo convencional
El filme se centra en la historia de Cinthia, esa chica muy joven que espera a los ‘clientes’ en la zona roja de Buenos Aires con sus colegas de siempre. Y justo ahora aparece ese viejo que no le gusta, muy bien trajeado, pero tan vicioso y pesado que la exaspera. Sin embargo es el que mejor paga. Claro, dicen que es un político. Cinthia no sabe que en horas estará huyendo manchada con la sangre del diputado, aspirante a diputado o lo que sea, al que un extraño le disparó varios tiros en ese hotel del Bajo al que fueron juntos.
A partir de ese momento todo cambiará para ella. Aparecerá Julián, un desconocido salido recién de la cárcel, que se jugará por la chica y con quien podrá refugiarse en casa de Rita, una travesti amigo. Pero nada saldrá como lo pensaban, porque esto es una causa de corrupción, gente del poder, drogas y hasta un periodista que sigue la trama desde un diario que espera la primicia.
PELICULA DE GENERO
‘Rouge amargo’ es un policial convencional, dentro de las llamadas ‘películas de género’, con una trama obvia, sin sorpresas, con estereotipos en cuanto a personajes, un lenguaje muy televisivo y eso sí estupendo ritmo.
Gustavo Cova es el director de la recordada ‘Alguien está mirando’ y la lograda ‘Boogie el Aceitoso’, entre otras y aquí tiene el apoyo de actores como Luciano Cáceres que es Julián, el recién salido de la cárcel, la promisoria Emme (‘El niño pez’) y una revelación para el cine, Gustavo Moro como Rita. Con ellos, el profesionalismo de Rubén Stella, junto al malo muy malo Cesar Vianco y en el papel del periodista, Nicolás Pauls.