Salvador Dalí. En busca de la inmortalidad

Crítica de Melody San Luis - Funcinema

SALIR DE LA TELA

Cuando accedemos a la biografía de un artista nos adentramos en su mundo, en su intimidad. Pero en el caso de Salvador Dalí pareciera que aún muerto siguiera trabajando desde el engaño y la sospecha a las posibles perspectivas ¿Dónde empieza el artista y termina la persona? Dalí se vuelve actor de su propio teatro o mejor dicho reconoce muy bien que todos formamos parte de un gran espectáculo. Es por eso que los límites de su obra se desdibujan para formar parte de un todo con su vida.

Su obra, como el documental Salvador Dalí: en busca de la inmortalidad trabaja, se vuelve en sí un laberinto que difícilmente podremos apreciar sin sentir que nos estamos perdiendo de un montón de otras interpretaciones. El montaje pausado permite mirar los lienzos y da una primera aproximación a los detalles. Pero deja la sensación de tener que explorar por fuera más detenidamente. Mientras, se escuchan a especialistas hablando de su obra o los mismos escritos del artista. Esto permite también vincular ciertos acontecimientos con lo que se está observando, pero lejos está de establecer una sola posible mirada. La obra no permite pensar en un entendimiento lineal.

Aún recorriendo toda su vida, el documental parece desbordar de información al punto de quedar corto. Pero esto es debido a la magnitud de la obra del artista. Se genera la sensación de que apenas se llegan a recorrer ciertos aspectos. Esto es un gran acierto en la forma en la que está realizado el film, porque abre puertas para que luego los espectadores sigan recorriendo.

El documental cuenta con un material muy interesante y lo recorre mostrando la majestuosidad de que tuvo Dalí para construir un mundo. Sus obras salieron de la tela para armar un show, tanto de su persona como de sus hogares. La vanguardia y la rebeldía que manifestaba para su época hacen que la vigencia de su arte siga intacta.

Los diseños arquitectónicos que realizó tienen gran importancia para la mirada del film. Es por eso que aparecen, como complemento del recorrido por estas estructuras, los testimonios de Dalí y Gala sobre las expectativas que tenían acerca de lo que iban diseñando y construyendo. Los bocetos y la fotografía también forman parte de esta aparición gradual de habitaciones que se iban sumando a la casa inicial.

A la par de Dalí, el documental pone bastante foco en la figura de Gala. No se queda con la idea de pareja y musa inspiradora sino que muestra cómo ella fue parte de la distribución y comercialización de la obra. Se enfoca en la idea un amor que les ayudó a sostenerse mutuamente, muy atravesado por el juego. Sin embargo, lo más interesante que el film plantea sobre ellos es ese velo de misterio, esa idea de no llegar a conocerlos del todo.