DEMASIADO AMABLE
Homenaje demasiado leve y amable al Hollywood del ayer. Y al cine, como vendedor de una realidad postiza, con sus divas extravagantes y su ídolos a ras del suelo. El film es una sucesión de apuntes humorísticos que se parecen más a un juego. Pocas veces los Coen lucieron tan ingenuos y tan poco exigentes, sobre todo teniendo en cuenta que el libro pivotea sobre un personaje real: Eddie Mannix, el ejecutivo de la MGM especializado en arreglar los entuertos de las estrellas, sus escándalos y sus caprichos. De cualquier forma, más allá de la falta de un libro más consistente y de una trama mejor desarrollada, los Coen nunca defraudan del todo. Y hay algunos hallazgos a la hora de parodiar, pero con mucha calidez, a los films romanos, a las estrellas, a las danzas acuáticas tipo Esther Willams, a los western, a las comedias musicales y al comunismo del Hollywood aquel.