El escritor oculto
A los dieciocho años se dio cuenta de que la vida era humo y la muerte una tragedia irreparable”, dice Carlos, hermano del desaparecido escritor Néstor Sánchez, un argentino notable de las letras, colega y amigo de Julio Cortázar, su padrino artístico, a cuya memoria se le dedica este bello documental. Carlos hace un buen racconto de su vida: gran bailarín de tango, incansable buceador del alma, un viaje a Perú lo acerca a la doctrina del Cuarto Camino, de Gurdjieff, a una mujer y a una interminable búsqueda por Europa y los Estados Unidos. Las memorias de Carlos, del hijo de Néstor Sánchez y de su esposa venezolana devuelven una intimidad, una fragilidad que contrasta con el vívido retrato del hombre alto y robusto, inquieto y a la búsqueda de insertarse en el mercado parisino, que dibuja su traductor de la editorial Gallimard. El alcohol, los caballos, la improvisación del jazz, su fuerte carácter, las estrategias literarias, el alma convulsionada; en boca de varios testimonios, esos son colores que perfilan al ausente personaje, el escritor a contrapelo del boom latinoamericano. Pero lo llamativo de este documental es la atinada polifonía de voces e imágenes, bellas fotografías por derecho propio (variados ángulos de la Torre Eiffel, el río Hudson, hallazgos a la vera del camino, sombras de pisadas) con que Matilde Michanie perfila al autor de Cómico de la lengua sin resignar su propia voz artística.