Pese a ser predecible, a no innovar, y aún más, a caer en muchos lugares comunes, la trama de la película comienza a despegar de su obviedad al preferir la construcción de personajes y atmósferas claves para la sucesión narrativa.
El juego que inicia “Se ocultan en la oscuridad” entre sueño y realidad, y el misterio detrás de la desaparición de una niña y la posible participación de todo un pueblo en ella, son los puntos más interesantes de una película que comienza transitando un sinfín de situaciones planteadas con anterioridad en infinidad de propuestas de género, pero que termina encontrando su propia voz y forma.