Walter Tournier es uruguayo y hace mucho que viene haciendo muy buena animación cuadro a cuadro con mucho esfuerzo. Este film es su primera producción “grande” con distribución internacional y está a la altura de su habilidad. Historia de aventuras con humor, realizada con muy buen gusto y precisión, alarga quizás un poco su peripecia, pero resulta un buen ejemplo de cine pensado para niños sin tratarlos como estúpidos.