La película de John Stevenson lleva a los personajes de Gnomeo y Julieta a Londres, y los hace participar en un misterio que los toca de cerca y que solo podrán resolver con la ayuda de Sherlock Gnomes, protector de los gnomos de la ciudad, y su compañero Watson. Con una trama de suspenso bastante sencilla y simpáticos toques de humor, Sherlock Gnomes es entretenida aunque algo esquemática. Las perfectas canciones de Elton John sacuden al espectador cuando lo que sucede en pantalla se vuelve un poco monótono y provocan una sonrisa inmediata (el músico es también productor de la película y hasta tiene un gnomo creado a su semejanza).