Esta es una adaptación mas moderna del clásico detective, que permite atrapar a un publico joven que hasta ahora no conocía al personaje, y es uno de los principales aciertos de la película.
El encargado de esta nueva versión es el director Guy Ritchie, una opción arriesgada considerando sus últimos trabajos. Ritchie tuvo un buen arranque dirigiendo films como "Lock, Stock..." y "Snatch", pero luego sus películas fueron muy flojas ("Swept Away", "Revolver", "Rocknrolla").
Aquí el director realiza un buen trabajo, creando una película de aventuras y acción bien filmada, con una muy buena ambientacion en una Londres oscura y sucia del 1890.
No se pierde tiempo introduciendo a los personajes y se mete directamente en la historia.
Holmes y Watson investigan el extraño caso de un asesino que vuelve de la muerte para seguir matando mujeres.
La trama no da pistas ni indicios que permitan al publico ir acompañando/descubriendo el caso, sino que hay que esperar hasta el ultimo momento para que Sherlock Holmes explique todo y lo resuelva por nosotros (al mejor estilo de la serie "Monk").
El otro acierto del film es la selección casi perfecta del elenco.
Robert Downey Jr. ha logrado un gran regreso, luego de sus problemas con drogas, y obtuvo el Golden Globe a Mejor Actor por su actuación. Entre "Iron Man" y "Sherlock Holmes" ya tiene aseguradas dos sagas para explotar. Aquí aporta todo su carisma para interpretar a un Sherlock medio reventado.
Jude Law acompaña perfecto en el papel de Dr. Watson y Mark Strong compone al asesino Lord Blackwood, un actor ideal para papeles de malo.
El único personaje que no encaja es el de Rachel McAdams, una actriz que me encanto en películas como "The Notebook", "The Lucky Ones" o "State of Play" pero que acá esta mal elegida para el papel de Irene Adler. No es creíble como la ex-pareja de Holmes y resulta innecesaria en la historia.
Habiendo recaudado ya mucha plata y con un final que deja abierta la puerta para una continuación, pronto se vendrá la segunda parte.