Descubriendo a Simón Radowitzky
¿Quién era Simón Radowitzky? Es la pregunta que uno se hace al acercarse a Simón, hijo del pueblo (2013), el documental de Rolando Goldman y Julián Troksberg con foco en este personaje que fue parte de la historia argentina pero que aún así es desconocido para la mayoría.
Simón Radowitzky fue un joven anarquista que apenas cumplidos los 18 años de edad pasó a la historia por haber asesinado a Ramón Falcón, jefe de la policía encargado de reprimir una manifestación anarquista el 1 de mayo de 1909. Simón fue puesto en prisión en la cárcel de Ushuaia y tras años de cárcel se llegó a un acuerdo político para su liberación. Pero la historia no termina ahí y el documental profundiza sobre los aspectos más sobresalientes que lo rodearon para así unir todas las piezas que reconstruyen la vida y obra de Simón Radowitzky.
Simón, hijo del pueblo sigue dos líneas narrativas. Una encargada de armar el rompecabezas histórico de este controvertido personaje a cargo de Osvaldo Bayer, construida a partir de un relato clásico que se entremezcla con imágenes de periódicos de la época y visitas a los lugares en los que Simón vivió los momentos claves de su vida. Mientras la segunda línea se centra en Julián Goldman, un adolescente que al ver en una revista uno de sus apellidos con la foto de Simón comienza una búsqueda personal para saber quién era este chico que a su misma edad quería cambiar el mundo.
Desde lo cinematográfico resulta más atractiva la segunda historia, por la forma de abordar el tema y cómo éste es puesto en escena. Mientras que aquella en la que Osvaldo Bayer lleva el relato histórico se vuelve más formal, y si bien es rica por lo que cuenta desde lo cinematográfico mantiene una estructura clásica cercana al formato periodístico.
Simón, hijo del pueblo es una buena forma de encontrarse y conocer a un personaje olvidado, que al igual que muchos otros aún no encontró su lugar en la historia, pero que al menos el cine logra reivindicarlo.