El canto del sinsajo se escuchará por última vez a partir de este jueves -un día antes del estreno mundial-, en el final de la saga basada en los libros de Suzanne Collins. Otra mujer, que como la creadora de Harry Potter, revolucionó el mundo de la literatura adolescente y que alcanza a los adultos jóvenes también con algo de acción, fantasía pero también temas sociales.
En esta segunda parte del tercer capítulo se juega el destino de la revolución, que ya no es juego, aunque conserva sus reglas arbitrarias y a muchos de los vencedores que se jugarán para reunificar a los distritos bajo un nuevo poder, más sano, en teoría. Katniss Everdeen, la heroína de cara aniñada, deberá pensar qué es lo que quiere: venganza por los que murieron, pacificar al pueblo, que se terminen los Juegos a los que el malvado Presidente Snow sometiera a los jóvenes de los distritos a vencer o morir para sólo premiar a los únicos que ganan y dejar en la miseria a los perdedores proveedores del Capitolio. Tiene a sus espaldas más que sus flechas incendiarias, la responsabilidad por ser la cara visible de una gran movida la inquieta y parece sobrepasarla.
La versión en 3D nos trae algo, que quizá sea un recurso no tan importante para la trama pero es curioso y hace bien a la vista: el subtitulado se ubica entre medio de los personajes que dialogan, o en lugares que no molestan, los títulos también tienen esta estética y habla bien que hasta eso fue trabajado en la producción visual. Los desafío que se queden hasta el último crédito final, ¿se atreven? Desde ya, les digo que no hay nada más, es el final, sin embargo, me pareció impresionante la cantidad de personas que trabajaron para este filme. Es un ejercicio en contra de la ansiedad de los públicos.
Las decisiones se precipitan, la confianza está dañada y no se sabe quién es leal a la gran causa. Las técnicas de los Juegos servirán esta vez para ser más mortíferas pues sólo los más fuertes con Katniss al frente son los que pueden llegar a Snow (Donald Sutherland). Coin (Julianne Moore), con su presidencia paralela desde el descubierto Distrito 13, tiene una idea en mente y es lo que se develará en este final final.
Plutarch, el personaje interpretado por Philip Seymour Hoffman, tendría que haber sido uno con mayor peso, pues está entre Coin y las flechas del Sinsajo, Katniss, lamentablemente, ya no contamos con él físicamente y es un poco, Haymitch (Woody Harrelson), el que toma la posta.
Por otra parte, estará la vida y elección romántica de Katniss entré Peeta (Josh Hutcherson), quien siempre se jugó por ella y que hasta quedó dañado y casi convertido en un "muto" (mutante) por las torturas; y en el otro rincón, Gale (Liam Hemsworth), el ángel guardián de la madre y la hermanita de Katniss, que hasta este último capítulo no arriesga tanto y se da cuenta de que el corazón del Sinsajo está tironeado.
Con muchos momentos de tensión, otros de intenso dramatismo, creo que no defraudará a los seguidores de la saga. Si bien era más vistoso cuando el reality era un juego peligroso, esta transformación en una guerra, se puede ver más desde el aspecto político y social y desde otros contextos contemporáneos.
Dirigida como las 2 anteriores por Francis Lawrence, ya que la primera fuera dirigida por Gary Ross, presenta un gran espectáculo para ser visto en pantalla grande.