Invasión de mal gusto
En una muy mala decisión opté por darle una oportunidad a esta película de los hermanos Strause y la alquilé. El argumento se basa en un mensaje codificado que la NASA habría enviado el 28 de agosto de 2009 a las profundidades del espacio para que pueda ser captado por algún tipo de vida extraterrestre, y que ese llamado fue escuchado... ¡Escuchado por una raza de aliens que sólo podrían describirse como una cruza de los moluscos voladores de Matrix y zombies asesinos come cerebros!. En una absoluta falta de imaginación (y buen gusto), los Strause deciden hacer una bizarra mezcla de otros films como Guerra de los mundos, Matrix, Terminator Salvation y Día de la Independencia, para terminar entregando este film que francamente es un horror. A medida que va avanzando, la historia se hace cada vez más absurda e increiblemente insoportable, al punto de querer salir corriendo hacia el Video club a exigir que nos devuelvan la plata del alquiler. Actores carentes de talento y carisma, una trama sin sentido, un ritmo lento que desespera y un final, que cuando menos, produce en el espectador una risa nerviosa, resultado de una vergüenza ajena sin precedentes.
Para resaltar, los efectos especiales, que son de alta calidad sin duda, y un presupuesto utilizado de solo us$10.000.000. Creo incluso que el presupuesto fue bajísimo previendo que el film resultaría una BASURA TOTAL, una sabia decisión, ya que conocemos otras producciones de presupuestos altísimos que han fracasado mucho más que Skyline.
Para terminar, algunos consejos para los cinéfilos como yo, que varias veces nos dejamos llevar por el impulso de ver una película que de ante mano sabemos va a ser pura basura, pero que por curiosidad terminamos cayendo en sus redes:
La experiencia se ha repetido muchas veces con otros films de gran pespliegue visual como 2012, Alien vs. Predator, The Last Airbender, etc. ¡Fuerza de voluntad! Ya sabemos que será una pérdida de tiempo.
¡Revisar la filmografía del director! Los Strause antes de esta cinta dirigieron Alien vs. Predator 2, otra producción asquerosa.
Por último, escuchar a nuestra conciencia, que prácticamente nos señala a gritos que estamos tomando la decisión equivocada.