La joven cineasta cordobesa de 31 años recién empieza. Sobre las nubes es su segunda película. La primera se tituló Las calles. En ambas películas, el lugar elegido era decisivo para la trama. En Las calles, los pobladores volvían a bautizar las calles de Puerto Pirámides con distintos nombres, sustituyendo el número por nombres, o la matemática por la historia. En Sobre las nubes, todo el relato se circunscribe al centro de la ciudad de Córdoba. Los escenarios elegidos cubren una superficie no muy extensa que todo cordobés puede reconocer, más allá de que el procedimiento formal de la película devuelve una representación enrarecida de una ciudad muy transitada. En las dos películas, además, el sentimiento de comunidad tiñe la evolución narrativa.