Propuesta con accidente
Matías es un traductor de ruso, divorciado y padre de una adolescente. A una muy mala relación con su ex-mujer, se agrega que su propia hija parece pasarla mejor con el novio de la madre (Rody) que con los aburridos programas que su padre le propone. Matías ha logrado que su hija pase con él un fin de semana entero, pese a los reparos de su ex-esposa, y ese mismo día es secuestrado por Interpol quien le encomienda una tarea de traducción en el marco de una actividad de inteligencia. Allí Matías descubre que el agente encargado de la operación no es otro que Rody, quien también allí se anoticia que el traductor que le han conseguido es el ex-marido de su novia.
Inicialmente le ofrece que vuelva a su casa, pues entiende que esta operación es demasiado para él, pero Matías, cuyo orgullo está demasiado herido, no sólo por una mujer que lo ha dejado por este hombre, sino por su propia hija que ahora parece estar repitiendo el mismo esquema, decide afrontar la tarea con hidalguía. Matías consigue una contraseña secreta que pone en peligro su vida y terminará descubriendo que no puede confiar ni siquiera en el propio Rody, si bien este último, finalmente, se redime mostrando con su renuncia que el amor que siente por su mujer y la hija de Matías es auténtico.
La propuesta termina siendo, sinceramente, mejor de lo que los afiches publicitarios parecían ofrecer. De todos modos la película adolece de ciertas imperfecciones formales, así como de algunos desaciertos en el perfil de público al que parece querer dirigirse.
En principio, el producto pretende –en apariencia- replicar la estrategia de exhibir un relato que no sólo pueda disfrutar toda la familia (como venía de hecho haciendo la empresa Disney y Disney-Pixar), si no que incluso sus elementos puedan ser asimilados según las diferentes edades, como lo viene haciendo en particular la empresa Dreamworks, cuando agrega en el relato ciertos gags con contenido sexual, o donde el componente cómico depende exclusivamente del dominio de cierta intertextualidad.
Pero Socios por accidente fracasa en esta tentativa, en primer lugar, porque no quedan del todo enmascarados de modo suficiente los gags de contenido sexual que Rody y Matías protagonizan, pero además, porque el relato en su estereotipación y excesiva simpleza y puerilidad no alcanza a captar la atención del adulto de un modo satisfactorio. Es decir, no se ha logrado esa región intermedia en que tanto niños como adultos puedan disfrutar por igual del producto: parece más apta para un público adolescente, que para niños. Y si hay que concebirla como película disfrutable por adultos, la propuesta resulta demasiado chata como para cumplir cabalmente con ese objetivo.
La estructura narrativa de la forma cómica, en su variante buddy film, es adecuada formalmente. Representa la forma más típica de consustanciarse en la pareja despareja, es decir, en la unión de personajes de caracteres contrarios, en este caso, el par valiente/cobarde; aburrido/divertido; inteligente/tonto; hábil/torpe, etc. (Consúltese nuestra crítica sobre 2 Guns/Dos armas letales). Quizás se le puede criticar un empleo de la forma excesivamente estructurado, en el que la película no ha sabido moverse con comodidad, poniendo su contenido al servicio de la forma, y no la forma al servicio del contenido.
El otro gran problema es la dirección de actores o la actuación en sí misma, y la construcción de personajes, que ha resultado realmente deficiente. Si bien Listorti sale razonablemente indemne debido a las situaciones cómicas en las que se desenvuelve con familiaridad, los personajes en general resultan chatos y estereotipados hasta el absurdo. Particularmente esto se aplica al personaje de Rody, contrafigura de Matías, que no sólo está estereotipado como carácter, sino que incluso presenta una ambigüedad medio ridícula entre villano/héroe que no termina de entenderse o justificarse. Y esto va de la mano del extraño desenlace en el que Rody termina yéndose para seguridad de su familia y la de Matías.
No termina de quedar claro si la familia se volverá a reunir o no, etc. A esto se suma una mala actuación de los protagonistas en general que hace decaer bastante la atención en los momentos no cómicos.