Sin ser un producto novedoso o ambicioso, Socios por Accidente cumple con lo mínimo e indispensable que se espera de una comedia para toda la familia.
¿Le gustooo o no le gustoooo?
Matías (José María Listorti) es un traductor de lengua rusa, que según su hija Rocío, lleva una vida rutinaria y aburrida. Rody (Pedro Alfonso), actual pareja de la ex mujer de Matías, trabaja como agente secreto de Interpol y por una investigación requiere los servicios de un traductor de ruso. Inesperadamente Matías es el elegido para esta tarea, que acepta sin dudar para demostrarle a su hija que puede ser tan valiente y tener una vida llena de acción como la de Rody. Su inexperiencia y miedos complican el caso y de un momento a otro, se verán envueltos en una huida intentando salvar sus vidas.
Yo no soy partidario de medir a todas las películas con una misma vara. Obviamente detrás de producciones como El Padrino o El Ciudadano hay diferentes ambiciones a las que podemos encontrar en un proyecto como Socios por Accidente.
La nueva película de los directores Nicanor Loreti (Diablo) y Fabian Forte (Malditos Sean!, La Corporación) parte de una idea original de una de sus figuras, José Maria Listorti. El humorista surgido de Videomatch, junto a dos guionistas que se sumaron en el camino, dieron forma a esta comedia de accción que siempre tuvo en claro su objetivo: ser un entretenimiento para toda la familia.
En los años setenta y ochenta en Argentina, hubo un "boom" en lo que a comedias familiares con toques de acción respecta. Titanes en el Ring llegó al cine y se fueron sumando propuestas como Los SuperAgentes, Brigada Explosiva y Los Extermineitors. Todas ellas dieron una gran cantidad de secuela que hicieron furor entre los mas chicos e incluso ese amor se mantiene hasta el día de hoy. Pero mientras el espectador argentino crece, ya no se permite disfrutar de ciertos placeres, y las comedias familiares son uno de ellos. Uno se empieza a fijar mas en el presupuesto, en el guión, en las actuaciones, etc. Lo permisivo que fuimos con ciertas obras durante nuestra infancia se deja de lado cuando somos mayores. Y si bien es cierto que la comedia familiar se puede salir con la suya mas libremente en ciertos aspectos que otros géneros, el problema está cuando los realizadores toman conciencia y abusan de esto.
Socios por Accidente es una comedia de acción familiar, con todo lo bueno y lo malo que eso conlleva. Quienes gusten criticarla y destruirla, sin dudas encontrarán razones para hacerlo. Y quienes se permitan sentarse a olvidar sus problemas y divertirse por 90 minutos, también lo podrán hacer.
La película parte de guión simple pero cumplidor, que nunca se aparta de lo que quiere contar y que tiene siempre presente su temática. Es cierto que no estamos ante la presencia de un guión de hierro y que no resistiría el mas mínimo análisis, pero dentro de sus pretensiones es suficiente. Como dijo el compañero Santiago Balestra: "Es Tiempo de Valientes escrita por los guionistas de Exterminators". Una especie "buddy movie" o de camaradería entre hombres, con buena química entre sus protagonistas (de la cual hablaremos un poco mas adelante) y que se apoya en el tipo humor que supo convertir en un éxito a aquellas cintas que mencionábamos anteriormente, hace ya casi tres décadas atrás. El problema aquí es que, mientras que por el lado de la nostalgia sin dudas es un lindo mimo por parte de los realizadores, los chistes no siempre funcionan. Ya sea por que no estén bien trabajados o simplemente ya no nos reímos como solíamos hacerlo, la realidad es que fallan más de los que concretan.
José María Listorti y Pedro Alfonso hacen su debut cinematográfico como actores con esta película. Es cierto que el guión nunca los exige demasiado, pero aun así sus interpretaciones son el punto mas flojo del film (para ser sinceros, Alfonso queda un poco mejor parado). Ya sea sobreactuando o simplemente haciendo todos los diálogos en un mismo tono, pareciera que nunca lograron encontrar un punto medio. Pero la falta de capacidad actoral sin dudas la complementan con la buena química que hay entre ellos. Si bien no es suficiente para salvar sus interpretaciones, sirve es a la hora de hacer funcionar el puñado de chistes que nos logran sacar alguna carcajada.
Pero con todo lo que podemos criticarle a Socios por Accidente, tambien es digna de que mencionemos sus puntos mas fuertes. Como dijimos antes, las comedias familiares (en la gran mayoría de los casos) terminan siendo productos descuidados, que se ven y se sienten baratos, en el peor sentido posible de esa palabra. Pero nada de eso sucede aquí. La cinta en todo momento se ve cuidad, tanto desde la dirección como desde la producción. Pareciera que nada está librado al azar. Incluso hay un gran trabajo de la gente de dirección de arte. La casa donde vive el personaje de Listorti -y acá le robo la frase a un amigo- parece un consulado de la vieja Unión Soviética. Detalles como esos abundan y demuestran que hubo un genuino interés por parte de los realizadores de un entregar un producto digno. Por su parte, Loreti y Forte le imponen su estilo a la cinta. La acción se mueve rápido y hasta se dan el lujo de recurrir a recursos que recuerdan al cine de Edgar Wright con sus mini-montajes (cosa que me puso muy contento de ver). Sumando a eso algunas muy buenas ideas visuales, la película logra salirse con la suya y resulta justamente lo que su afiche afirma: Diversión para toda la familia.
Conclusión
Socios por Accidente no le dará el gusto a aquellos que esperaban encontrarse con un producto improvisado para deshacerse en agravios. Pero tambien es cierto que no es un producto perfecto. A pesar de las limitaciones actorales de sus principales figuras y con un guión por demás de simple que no guarda demasiadas sorpresa, la película termina dependiendo casi en su totalidad del buen pulso narrativo que le imponen sus directores, quienes hacen malabares para que nunca termine de caer.
Dentro de lo que la comedia familiar argentina tiene para ofrecer, cosas mucho peores que Socios por Accidente han llegado a la pantalla grande. Pero incluso con sus problemas, la cinta logra su cometido y resulta una buena opción para los chicos durante estas vacaciones de invierno, seguramente ellos le saquen mayor provecho.