A la frinfra!
Gracias a la reposición televisiva de “Las Aventuras de Hijitus”, además de su edición en DVD, los chicos del nuevo siglo conocen a Neurus, Pucho, Serrucho, Cachavacha, el Comisario y otras tantas creaciones de Don Manuel García Ferré. Los personajes citados anteriormente forman parte del elenco de esta aventura cinematográfica que tiene como protagonistas a la cantante Soledad y al inefable Larguirucho.
Se trata de una historia simple por demás. Casi podría decirse que no hay un guión, y lo que hay no está expuesto de una forma muy estricta que digamos. Basicamente nos presenta a Cachavacha y Neurus en su intento de sabotear a Soledad en cada una de sus presentaciones artísticas. No hay mucho más, solo las breves apariciones de Guillermo Andino, Pablo Codevilla, el Chaqueño Palavecino, Diego Capusotto y Carlitos Balá, quien protagoniza el segmento más divertido de la película.
Poco hay en este filme de aquel Larguirucho que era genio y figura de la eterna desventura. Apenas en el comienzo, con el título, da una mínima muestra de torpeza; más bien cumple la función de narrador de la historia, y también participa en ella.
Es destacable el trabajo del equipo de dibujantes en una escena en particular, la que tiene a Larguirucho como intérprete de una canción dedicada a los trenes que ya no circulan por las provincias y a sus estaciones de pueblo convertidas en edificios fantasmales.
La dirección de las secuencias en vivo está a cargo de Néstor Montalbano, profesional ducho en la recreación de un estilo setentoso al que parodia y homenajea en iguales proporciones en filmes como "Soy tu Aventura" o "El Regreso de Peter Cascada". Montalbano nos ofrece entonces segmentos más dignos de una película de "Argentinísima" que de una producción acorde a estos tiempos.
"Soledad y Larguirucho" no esconde en ningún momento su propósito: ser un vehículo promocional para la cantante de Arequito y, de paso, funcionar como descarado aviso turístico de la provincia de San Luis -productora del filme- con Neurus como guía. El resto es relleno, pero los que vayan en busca de las canciones de Soledad y algo de humor simplón apoyado en personajes populares no saldrán tan defraudados.