Desde su opera prima, “Las vírgenes suicidas”, quedó claro que el universo cinematográfico de Sofía Coppola se nutría de los afectos y de sus carencias. Johnny Marco es un actor cuya existencia se ha movido hasta ese momento con las reglas del juego que acompañan a una celebridad. Instalado en el legendario hotel de Hollywood, Chateau Mormont, gasta sus días entre mujeres y excesos de todo tipo, hasta que la aparición de Cleo, su hija de 11 años, lo obliga a un súbito replanteo. La madre de la nena debe ausentarse por un tiempo, y él, separado, deberá hacerse cargo de esa criatura a quien ve como una desconocida. El tiempo que pasen juntos servirá para que Johnny eche una mirada severa a su pasado y se involucre decididamente en esa experiencia inédita de ser padre. Esa muchachita ha llegado trayendo vientos de cambio para el protagonista. Buena química actoral entre Stephen Dorff y Elle Fanning.