El mundo de Sofía
Esta última producción de Sofía Coppola, tiene todos elementos para no pasar inadvertida en la cartelera nacional: buen guión, excelentes actuaciones, locaciones atractivas y los climas intimistas que la directora sabe imprimir siempre en sus trabajos.
-Guión. Somewhere cuenta la historia de Johnny Marco, un actor hollywoodense que pasa sus días abúlicamente, entre fiestas, mujeres, alcohol y excesos de todo tipo. Cuando debe cuidar una breve temporada a su hija de 11 años, poco a poco comienza a agudizarse en el protagonista, la toma de conciencia de su vacío existencial.
El guión escrito por Coppola, remite sin duda a ciertas vivencias personales. La relación entre padre e hija- complicada por momentos, debido al contexto y el ambiente donde se mueve Johnny- además de sugerir claras connotaciones con su padre (Francis Ford), pone el acento en una decisiva y punzante crítica a los medios de comunicación y al mundillo de Hollywood en general.
-Actuaciones. El trabajo de Stephen Dorff y Elle Fanning en este film es sorprendente. Obviamente que cada uno de ellos está muy bien en sus papeles, pero la química que tienen juntos es fundamental para retratar una relación padre/hija poco usual, donde de a ratos los roles se invierten. La amistad que subyace de ese vínculo filial, sirve de elemento catalizador para dejar pasar por alto reproches y posibles recriminaciones. Los silencios y las miradas, tienen a lo largo de toda la película un valor vital, y los protagonistas saben adueñarse de ese valor (tan típico en la filmografía de Sofía) para retratar personajes creíbles, reales y hasta cercanos.
-Locaciones. Aparecen varios lugares atractivos, pero entre ellos cabe destacar el Chateau Marmont, hotel mítico si los hay, en donde vive el protagonista (y donde vivió temporalmente Sofía Coppola de niña, con su padre por los años `70). El Marmont es uno de los hoteles más emblemáticos de Los Ángeles, atravesado por miles de historias y leyendas, que jamás se sabrá cuanto de verdad y de mentira tienen. La directora no aborda ninguna de esas historias, se limita a mostrar sus rincones más conocidos, como la piscina, los bungalows, y sus salones. Sí es verdad, que en la breve participación de Benicio del Toro- cuando se encuentra en el ascensor con Stephen Dorff- hay mucho más que un simple cameo, ya que sobre Benicio se rumorea que tuvo relaciones sexuales en unos de los elevadores del Chateau Marmont con una actriz de Hollywood.
También los protagonistas se trasladan a Italia. Pero aquí, las locaciones son mayoritariamente interiores. Lo mismo fuese que estuvieran allí, en Londres o París. Aeropuertos, hoteles, habitaciones de hotel, casi los mismos lugares que ellos transitan en Los Ángeles. Sin embargo, cuando Johnny asiste a una trillada ceremonia de premios, la impronta italiana se hace presente, y la figura de Fellini (cine que se nota Sofía tiene muy visto) cruza la escena, con un baile y una canción que toman desprevenido al personaje de Dorff.
-Climas. Luego de María Antonieta, Coppola decidió volver con ahínco a sus historias minimalistas y despojadas, donde los excesos narrativos, dramáticos y en definitiva, de ningún tipo, tienen lugar. Una vez más, nos encontramos con personajes que vienen de otro lugar: en Las Vírgenes suicidas la familia protagonista llegaba a un nuevo pueblo; en Perdidos en Tokio el protagonista también en un hotel, se encontraba en un país diferente; en la antes mencionada María Antonieta la joven reina debía adaptarse a una nueva corte; y en Somewhere, Johnny vive en el Chateau Marmont, lugar que pese a sus lujos y comodidades ya no le brinda placer alguno. El tema de la no pertenencia es tan recurrente en el cine de Sofía Coppola, como lo son sus escenas poéticas, el cuidado en la elección de sus planos, y el buen gusto y la delicadeza hasta para representar un baile erótico.
La escena en la piscina (con imágenes subacuáticas incluidas) es una de las más bellas y dulces de toda la película; es donde la posibilidad de un nuevo y mejor tipo de relación entre Johnny y su hija se hace tangible.
La directora en más de una ocasión, ha declarado que el cine de la Nouvelle Vague ha sido para ella una fuerte influencia. Somewhere es un claro ejemplo de ello, el principio y el final de la película lo son. No importa que pasó antes o que pasará después con los protagonistas, lo que importa es que pasa ahora con ellos. La esencia de la película está en seguir su devenir, y el mismo muchas veces puede ser inexplicable.