La estética de video clip, el erotismo de un cuarteto de actrices para el infarto y un soundtrack acorde, conforman un cóctel fílmico etílico de enorme hipnotismo. Una experiencia lejos de los argumentos convencionales, un ejercicio que intenta provocar y seducir. Un cuento de hadas post MTV, plagado de excesos y erotismo, para disfrutar sin prejuicios.