Cuenta con una muy buena narración que nos relata parte de la vida del escritor, biógrafo y activista social austríaco judío de la primera mitad del siglo XX Stefan Zweig (estupenda interpretación de Josef Hader), quien debió exiliarse por su religión ante el arribo del nazismo.
El film aborda las distintas etapas de la vida de este intelectual y nos permite recorrer junto a él algunas zonas donde estuvo como: Brasil, Argentina y Estados Unidos, lugares donde dejó huellas desde 1936 hasta su muerte en 1942. Es una historia muy rica como así también el elenco que participa en ella, como el personaje de su primera esposa en la excelente composición de la actriz alemana Barbara Sukowa como Friderike Zweig. Además trabaja el actor argentino Nahuel Pérez Biscayart (que se encuentra trabajando en Europa hace un tiempo), tiene un interesante papel secundario como Vitor D’Almeida, al igual que la actriz alemana Aenne Schwa representando a la segunda esposa del protagonista, Lotte Zweig.
Todo su relato resulta atrapante, con una buena estética y una fotografía majestuosa, ayuda para disfrutar cada una de las épocas vividas, sus angustias y júbilos, además del reencuentro con su amigo Ernst Feder (Matthias Brandt), que vivía cerca de la casa de Gabriela Mistral (Márcia Breia), casualmente ellos junto a otras personas fueron quienes lo acompañaron hasta el día de su muerte.