Los nazis son humanos
A pesar de las constantes idas y venidas de la protagonista sobre la humanidad de los nazis, la película tiene un mensaje claro al presentarlos como iguales con la mínima diferencia de encontrarse en ese momento del lado victorioso de la guerra. Con marcadas diferencias entre aquellos soldados con algún tipo de respeto por sus cautivos y los otros, los que como en todo grupo humano, vencedor o vencido toman ventaja de su situación momentánea hasta exprimir la última gota de quien tienen por debajo.
La película relata un hecho que ocurrió alrededor de junio de 1940 en Bussy, un pueblo cercano a París. Francia es tomada por el ejército nazi y las familias deben recibir en sus casas a un soldado enemigo durante el periodo que ellos se queden en el pueblo. Este es el desencadenante de esta historia en la que Michelle Williams interpreta a Lucile, una joven cuyo marido debió partir a la guerra cuando recién se habían casado y que debe hacerse cargo, junto con su suegra, de las propiedades de su marido a quien sólo vio unas pocas veces.
Debe destacarse la tarea del director para elegir imágenes que además de contar perfectamente la historia y apoyar el relato, se componen de fotografías artísticas pasibles de llevarse premios por su calidad en sus encuadres y colores. Claro está que el paisaje que rodea este pueblo es una obra admirable de por sí, que Saul Dibb logra embellecer con personajes y puestas de iluminación perfectamente ubicadas para cada escena.
De las interpretaciones sólo se puede decir que aportan una gran credibilidad a la cinta, lo que no es poco al tratarse de una historia verídica. Encarnar personajes que realmente vivieron esa historia podría ser un factor limitante para algunos actores, pero no es el caso de Suite Francesa.
La musicalización, el ritmo, el melodrama y el sentimentalismo, marcan juntos un tono que quizá por la constante presencia de la BBC o los Weinstein en el rodaje, no le permiten al guion despegarse un poco y atrapar el interés del espectador, tornándose un poco larga y un poco lenta.
A pesar de contar con un gran elenco a la altura de las circunstancias, un diseño de arte completo y detallista, y una gran producción, a la película no le alcanza para hacer algo novedoso que la distinga de otras del género.