Aventura en los valles sagrados
Interesante es este primer trabajo en largo del director español Enrique Gato, que ya había creado dos cortos anteriormente acerca del simpático personaje que emula a Indiana Jones. En esta ocasión, nos trae una aventura en Latinoamérica, puntualmente en Perú, en donde Tadeo deberá defender los tesoros ancestrales de una ciudadela sagrada de las ambiciosas manos de una corporación caza tesoros (guiño, guiño, socialismo).
La aventura planteada es muy atractiva, no por su originalidad y factura artística, pero sí por su locación, por la misión bien intencionada que debe llevar a cabo el protagonista y por la buena elección de personajes secundarios que acompañaron al protagonista.
Perú es un destino muy de moda por estos momentos, es un país que respira misticismo y aventura, que ofrece belleza natural como pocas veces se puede apreciar en la vida. Situar un producto animado en Machu Picchu, el valle sagrado y Cusco, asegura una explosión de colores en la gran pantalla y el inmediato involucramiento para aquellas personas que hayan tenido la suerte de conocer estos paisajes y ruinas. Otro acierto fue el equipo que se conformó para acompañar a este albañil devenido en arqueólogo aventurero, un equipo formado por su fiel mascota, Jeff, la sexy profesora Sara, el alocado guía peruano y un loro mudo de pocas pulgas. La química entre todos ellos funciona muy bien y da lugar a momentos realmente divertidos, de un humor universal que va más allá de la comedia española.
Por último, el espíritu del film es bien sano y útil para los tiempos en los que vivimos, un tiempo en el que los sueños se ven muchas veces relegados por las restricciones que nos auto asignamos o por las que nos impone la sociedad. En ese sentido, la aventura de Tadeo Jones cobra mayor importancia y hace que el espectador, sobre todo el niño, aprenda algunas buenas consignas para el futuro.
Una buena aventura animada que apunta a un target más bien infantil, pero que no ignora por completo al adulto que muchas veces debe acompañar a los niños al cine brindándole algunos momentos que lo dejaran conforme. Más allá de que no tuvo mucho promoción en Argentina, es una buena opción para ver un producto distinto de lo que nos ofrece generalmente Pixar o DreamWorks.