Esta comedia no pasará a la historia ni mucho menos, pero tiene un mensaje muy lindo que merece ser transmitido y sin dudas que a la gente le gustará mucho.
Desde hace 30 años, anualmente un grupo de cinco amigos deciden dejar de lado sus trabajos, familias y cualquier tipo de obligación, para que durante el mes de mayo, puedan jugar como chicos de 10 años a la mancha. El mejor de este grupo, quien nunca ha sido alcanzado por ninguno de sus compañeros es Jerry (Jeremy Renner), alguien que se toma muy en serio el juego y alardea con su imbatibilidad. Es por eso que el deseo de alcanzarlo, por parte de sus amigos, crece año a año. En esta oportunidad, Hougie (Ed Helms), Callahan (Jon Hamm), Randy (Jack Johnson) y Sable (Hannibal Bures), saben exactamente donde estará Jerry y es una situación perfecta para atrapar a su amigo más hábil, involucrando casi por accidente a Rebecca (Annabelle Wallis) una periodista del The Wall Street Journal y a la esposa de Hougie, Anna (Isla Fisher).
En esta película llena de estrellas del humor, hay que destacar la presencia de alguien que no tiene tanto rodaje en este este tipo de películas como lo es Jeremy Renner. Conocido mayoritariamente por su papel en el MCU de Clint Barton -Hawkeye-, muchas dudas se despertaban en cuanto a cómo podría llevarse él con un guión específicamente para hacer reír al público. Afortunadamente, la actuación de Renner es una de las piezas claves para que esta peli con una premisa tan burlona y simplona, termine siendo muy gratificante por momentos. El enfoque de su personaje, hace entender a la perfección por que Jerry es el mejor jugando a la mancha. Aprovechando la destreza física de Renner, el director se encarga de explotar su facilidad para las coreografías de acción y que estas no queden descuajeringadas del resto del film.
El otro que destaca sin lugar a dudas, no es otro que el actor más solicitado para las películas de comedia. Después de su explosión en The Office (2006-2013) y de ser el dentista más loco del mundo en la trilogía de The Hangover, Ed Helms demuestra porque es el hombre comedía de estos tiempos y es el que básicamente se encarga de poner el pecho en esta película. Teniendo los mejores diálogos, las mejores escenas de humor físico y hasta el mejor desarrollo de su personaje, Helms cumple a la perfección con ser el “líder” de este grupo de amigos que quizás ya haya decidido “madurar” de una vez. El resto de los personajes no logran convencer con sus actuaciones, cayendo en las simplezas de un guión que está claramente desarrollado para solo los dos personajes más importantes.
A nivel dirección, la peli cae en los conceptos básicos de la comedia actual. Con chistes de doble sentido, puteadas y excesos de estupefacientes por parte de sus protagonistas, la única diferencia que se puede ver y realmente destacar, sucede en las escenas de humor físico, que es lo único que puede sacar algún tipo de risa, sin eso, sería la típica comedia de estos tiempos. Otro acierto es el del soundtrack, que mezcla canciones de los 80s, 90s y actualidad con una gran variedad de estilos. Esto produce que la nostalgia de los protagonistas se transmitan de una mejor manera y sea una experiencia disfrutable para el espectador.
Esta comedia no pasará a la historia ni mucho menos, pero tiene un mensaje muy lindo que merece ser transmitido y sin dudas que a la gente le gustará mucho. A pesar de los lugares comunes de la comedia de estos tiempos, el director sabe sobre quienes puede apoyarse para transmitir una interesante historia verídica y lo hace de buena manera.