Te sigue

Crítica de Lisandro Liberatto - Alta Peli

Te Sigue es una película de terror con todos los ingredientes para convertirse en un clásico del género.

Pasalo y que no vuelva

El género del terror, y especialmente el de origen norteamericano, no viene atravesando uno de sus momentos más gloriosos. Ofertas no faltan, pero son realmente muy pocas las que llegan a lograr algún tipo de trascendencia. Más si buscamos entre el terror producido por los grandes estudios, donde lo último memorable podría ser El Conjuro de James Wan, y buena suerte en encontrar algún otro film similar que logre gustar y asustar, incluso con toda la parafernalia de Hollywood a disposición. En cambio dentro del cine independiente el panorama ya es otro. Las ideas son más arriesgadas y la falta de recursos lleva a sus directores a apegarse más a la idea de que menos es más. Te Sigue (It Follows), de David Robert Mitchell, es uno de esos casos.

Jay es una bella adolescente que se está conociendo con Hugh, un joven que aunque parece totalmente inofensivo tiene un comportamiento un tanto extraño. Durante una cita llevan el auto hasta un lugar oscuro para por fin poderconsumar su amor por primera vez. Luego de esto Hugh le revela a Jay que ahora "eso" la sigue. Y la única forma de lograr que "eso" deje de seguirla hasta consumirle la vida por completo, es teniendo relaciones con otra persona y así continuar pasando "eso" hacia adelante.

Y ¿que es "eso"?. Todo lo que sabemos es que siempre es un es un ser humano completamente diferente -aparentemente ya muerto- que camina lentamente en linea recta hacia nosotros. Y tarde o temprano, sin importan lo lejos que nos vayamos o lo escondidos que permanezcamos, al igual que Liam Neeson en Taken, nos va a buscar, nos va a encontrar y nos va a matar. Pero si bien por un lado el poco conocimiento que tenemos de "eso" lo vuelve un antagonista sumamente interesante y escalofriante (ayudado tambien por un gran trabajo de casting y maquillaje), transforma a la película en una suerte de vale todo, donde esta fuerza imparable se contradice con lo poco que se plantea en un principio. Al punto de que siempre avanza hacia adelante pero en determinados momentos permanece estático mirando, o adquiere habilidades que no sabíamos que tenía en un principio, u otros momentos a los que mejor no referirse para no arruinar la experiencia. Todo este problema se vuelve todavía más evidente en el tercer acto, cuando por medio de un plan sin ningún sentido, el grupo de jóvenes amenzados por esta maldición venérea intenta deshacerse de ella. Pero por lo menos en mi caso todo esto lo sentí más bien como un detalle. No puedo decir que me haya hecho mucho problema al respecto. Porque en definitiva ni los protagonistas y el espectador saben absolutamente nada sobre la verdadera naturaleza de "eso", más allá de lo poco que nos revela la película.

Es evidente porqué tanto fanáticos del cine de terror -entre los que me incluyo- aseguran que Te Sigue es de lo mejor que dio el género en los últimos años. Es una propuesta diferente, que no se limita a servirnos todo en bandeja y espera que el espectador pueda atar algunos cabos sueltos, y seguramente varias cosas que se perdieron en una primera visión se revelarán durante una segunda o tercera. A si mismo, se nota que el director David Robert Mitchell hizo su tarea. La cinta toma elementos de otras películas de terror, los transforma y los resignifica. Crea su propio universo, atemporal, casi onírico, donde todo se desarrolla lejos de la presencia de un adulto, quienes hasta pueden volverse un obstáculo (clara referencia a A Nightmare on Elm Street del recién desaparecido Wes Craven). Hay también algo del J-Horror (cine de terrror japones) que hizo furor en el mundo al comienzo del siglo XXI y hasta de El Resplandor, a la cual nos recuerda con travellings perfectos y una extraña atmósfera que se crea gracias a un elegante trabajo de fotografía y, en especial, gracias a una escalofriante banda sonora con sintetizadores.

Conclusión

Te Sigue es sin dudas la mejor película de terror que van a poder ver en cines este año, y no tengo dudas de que permanecerá en la memoria de los fanáticos del género por un largo tiempo. Es sencillamente terrorífica, original y hasta un verdadero placer a los ojos y los oídos. No es perfecta (aunque queda muy cerca), y los espectadores que vayan buscando una explicación, o hasta algo de lógica, no la van a encontrar. Pero así es el universo creado por Mitchell: nada es seguro, nada es concreto... y eso sí que es aterrador.