La primera película de Seth MacFarlane con actores “en vida real” es una historia sencilla con una serie de gags para reir un rato y no mucho más.
Seth MacFarlane ya estrenó su película el pasado Junio en USA. De la mano del BAFICI Animado recibimos la primera proyección oficial en nuestro país en el cierre esperando por su estreno el 4 de octubre en nuestro país. La película generó risas, muchas por momentos y luego es una meseta donde no sucede nada nuevo, lo cual a priori no es algo necesariamente malo. Otra cosa que no entendí es por qué el oso sostiene un cartel que dice que la peli es para mayores de 18 años. Para mí, tranquilamente la pueden ver jóvenes en los albores de la pubertad. Ya me parece un tanto ridículo prohibir películas para mayores de esa edad, es simplemente absurdo. En el caso de esta peli, no tiene ningún sentido más que el absurdo que puedan encontrarle los polémicos y generalmente contraproducentes censores. O quizá sea una vuelta marketinera en donde quieran mostrarla como “prohibida”, buuuu.
Argumento
John Bennett, (Mark Wahlberg) era un niño solitario y sin amigos hasta que su oso de felpa cobró vida propia y se volvieron inseparables. A los treinta y cinco años John sigue siendo amigo de Ted y su novia de hace diez años, Lori (Mila Kunis). El conflicto pasa porque Lori quiere avanzar hacia una relación más comprometida pero esto no es posible en la medida en que John siga apegado a su osito de la infancia y no se haga cargo de nada. Entonces Mark tiene que decidir entre Ted y Lori. Él quiere estar con su novia y hace los cambios necesarios pero con altibajos, sin comprometerse del todo. La resolución pasa ya no por tener a Ted cerca sino por entender que el crecimiento es personal y no está atado con quien se relaciona sino cómo.
¿Humor ácido?
Sí, ponele. Como espectadores de Family Guy esperás chistes de esa índole y ahí están. Tiene momentos muy buenos que causan mucha gracia aunque por momentos abusa de los gags y nada más. Eso no está mal, me parece que si es una comedia no tiene porque respetar en forma marcial la línea argumental o tener sentido siempre. Así funcionan las últimas temporadas de Family Guy también. A veces abusa de los chistes de judíos no siendo gracioso, buscando que sea gracioso nada más por nombrarlo.
Me gustó la inclusión de Sam Jones (Flash Gordon), como el héroe de la infancia de John y Ted que aparece y forma parte del delirio general de la peli. Un detalle del director que es consistente con Family Guy son las escenas de pelea y persecución que se parodian en la serie. John y Lori tienen que rescatar a Ted en el final a medida que la tensión va subiendo y el oso se escapa de su captor y termina escalando una torre en el estadio de baseball.
Conclusión
Por un lado pienso que se buscó con esta película hacer hincapié en el humor que “va más allá”, que busca romper fronteras morales con el sexo, la droga, los excesos en sí. Todo eso es moneda corriente que quizá romper los valores de nuestra sociedad hiperreal y excesivamente mediatizada sea volver a las películas de Mel Brooks o Monty Python que pecaban de graciosas y sutiles.
Acá es donde me pregunto si recomendaría esta peli a alguien que va a pagar $40 para verla, tan sólo de la entrada. Hoy ir a un cine comercial con otra persona puede llegar a salir $100 tranquilamente con descuento en la entrada y la compra de un combo para dos. En ese caso, yo les recomendaría otros planes. No es un gran película sino una más para pasar el rato y listo. Es probable que si Seth MacFarlane hace otra peli sea mucho mejor pero esta, para mí no vale $40 en el cine. Por eso pagué $10 en el Bafici, All right!
Pero no se desanimen, reír van a reír, un rato, y nada más.