Un adolescente viaja sin ganas al sur, a encontrarse con un padre que vive allí con su nueva familia. Se conocen poco, y no parecen muy contentos de verse. El padre -Germán Palacios-, es un tipo hosco, de pocas palabras, a juego con el entorno: una naturaleza fría, áspera, escenario de trabajo duro y esfuerzo constante. Con rigor formal, este debut en el largo de la directora Natalia Garagiola, premiado en la mostra de Venecia, sorprende por la potencia y madurez de su forma de contar, la puesta en escena de un mundo de hombres, en el que los detalles y los silencios adquieren peso especial. Con otro muy buen buen debut, el del joven protagonista, Lautaro Bettoni.