Tesis sobre un homicidio

Crítica de Alan Echeverría - Cinéfilo Club

Otra eximia muestra de lo que puede dar Darín

Tesis sobre un homicidio es un muy interesante thriller psicológico, narrado inteligentemente sobre una atmósfera oscura y de una factura técnica impecable.
La historia nos remite a un abogado penalista retirado que se dedica a la docencia universitaria, encarnado por un Darín del cual ya nada nos sorprende y, una vez más, vuelve a dar cátedra desde su sublime actuación. Una ráfaga de intriga se apodera de la pantalla al momento de la incursión en escena de un joven proveniente de otro país que decide anotarse en el seminario de criminología dictado por nuestro protagonista.
Apenas pocos minutos más, un asesinato en los alrededores de la facultad acrecienta el clima sombrío que se venía generando. Y, a partir de allí, comienza una suerte de disputa intelectual entre el misterioso muchacho y el experimentado letrado, a base de hipótesis o conclusiones sobre lo que para uno representa la justicia y las refutaciones correspondientes de la otra parte. Ambos moviéndose como si estuviesen en un tablero de ajedrez, con frases sugestivas y dignas de analizar.
Lo raro y a la vez destacable de la película radica en el ascenso del suspense a pesar de contar y mostrar todo el tiempo un solo sospechoso, aquel joven enigmático al que el personaje de Darín no hace más que encerrar en su mente como el autor del homicidio, cayendo en una casi obsesión, con un interrogante que se mantiene en vilo hasta el final.

LO MEJOR: la actuación de Darín. Elementos técnicos, la ambientación intrigante y oscura que se le da. Los diálogos.
LO PEOR: la actuación de Calu Rivero no está a la altura del film.
PUNTAJE: 7,80