¡Una más de Thor! Esta vez el Dios del Trueno junto a Loki deberán enfrentarse a su hermana, Hela. La desgraciada no solo le rompió el martillo a Thor, lo que demuestra que es más fuerte que ellos, sino que también los envió a otro mundo, donde a uno lo encuentra una Valquiria que lo vende como luchador y el otro hermano se codea con los de arriba (se imaginan quién es quién, ¿no?). La cosa se puso interesante cuando en el primer combate Thor tiene que pelear con Hulk, él hacía dos años que estaba verde así que no lo conoció.
En el film nos encontramos con los personajes de siempre: Thor (Chris Hemsworth), Hulk (Mark Ruffalo) y Loki, (Tom Hiddleston), quienes actúan con total naturalidad. Estos tres actores ya llevan en la piel el papel de cada uno; existe entre ellos esa chispa actoral que va más allá de la amistad que podrán tener fuera del set. Gracias a ellos llegas a amar la película.
Hablando de esta nueva villana, Hela, interpretada por Cate Blanchett, voy a destacar al que se haya encargado del maquillaje y vestuario, ya que con solo eso me creí que era malvada, además de que Cate es una buena actriz. Eso lo digo porque también la vi en el papel de buena interpretando a la elfa Galadriel en las tres películas del “Hobbit” de Peter Jackson.
Mark Mothersbaugh se encargó de la musicalización, la cual fue en todo momento acorde a cada situación, en cambio Javier Aguirresarobe estuvo al mando de la fotografía, donde sinceramente algunas escenas estuvieron muy buenas y otras carecieron de poder.
La película en sí me pareció comiquisima desde el comienzo al final, tiene un excelente reparto como les conté anteriormente, pero en un momento se vuelve densa. De todas maneras, por experiencias pasadas comprobé que es una maldita costumbre que tienen las películas de Marvel de extender las cintas al máximo, es algo que tendría que modificar porque puede llegar al hartazgo en el futuro, por más fanáticos que sean de los superhéroes de este estudio.
Tiene dos escenas post créditos, las cuales no salen de la historia de la película, pero en una tenemos un pequeñísimo pantallazo de “Avengers: Infinity War”. Si bien me reí en ambas escenas, esta vez no me gustaron, esperaba muchísimo más y es una lástima que se pierda este toque que Marvel siempre tuvo al final de sus films.