Aunque arranca de manera lenta y dubitativa, la cinta mejora a medida que avanza el metraje, regalándonos un climax de enorme impacto. El filme combina con certeza acción y humor
Pero el director Alan Taylor, parece rodar cada secuencia como si fuera parte del capitulo televisivo de una serie, las imágenes son correctas, prolijas pero sin personalidad ni fuerza. El elenco cumple, los guiños a otros personajes y películas del universo Marvel están, la union con los hechos acaecidos en LOS VENGADORES funciona de manera natural y el metraje fluye a paso firme. Pero si algo hay que destacar es la presencia de LOKI, el verdadero astro del filme, un personaje que se roba cada escena en la que le toca jugar.
Superior a la primera entrega, dejara conforme a los seguidores.