Paseando por las montañas
Robert De Niro y John Travolta cargan sobre sus espaldas el protagónico de este thriller de acción que, con una historia sencilla y escudándose en las dos figuras, se torna interesante al comienzo pero promediando la mitad y hasta el final solo logra no aburrir.
En una cabaña alejada de todo urbanismo, en una inhóspita región de los montes Apalaches, reside un ex veterano de guerra americano que se cruzará con un ex soldado de origen serbio que busca venganza.
Ambos emprenderán una casería muy particular, como el juego del gato y el ratón, donde De Niro y Travolta se persiguen y torturan, pero nunca se ejecutan, colocando a los personajes al borde del ridículo una y otra vez, con situaciones completamente inverosímiles y algunas otras casi risibles, como aquella del final con redención incluida.
Las formas de zafarse son tan absurdas que anulan aquella tensión y suspenso lograda en el comienzo.
El film desaprovecha las posibilidades dramáticas de un terreno hostil y la tensión por sobrevivir a una lucha en dicho escenario. Algo que desarrolla muy bien el film polaco protagonizado por Vincent Gallo Essential Killing, filmado en un registro muy realista y casi sin diálogos que procura mostrar visual y visceralmente lo que un prófugo debe padecer para sobrevivir en los bosques nevados y perseguido por sus captores.
Un De Niro en piloto automático y un Travolta que no genera empatía hacen que la excelente fotografía y los escenarios naturales terminen cobrando más relevancia que los protagonistas.
Solo el buen ritmo y su corta duración (menos de hora y media) evitan que nos aburramos en un film que hasta intenta inútilmente reflexionar sobre la naturaleza de un conflicto bélico.