Penúltima y quinta película de la saga de Tinker Bell que concluirá el año que viene con Legend of the NeverBeast.
Disney había preparado también una séptima y octava entrega que finalmente se cancelaron debido a que los productos de merchandising de estos personajes declinaron sus ventas.
La serie de Tinker Bell fue uno de los grandes tapados de Disney en estos últimos años que presentó películas muy cuidadas desde los aspectos artísticos y superaron a todas las cosas que este estudio hizo dentro de las producciones clase B desarrolladas para el dvd.
Cada film brindó un concepto diferente en los conflictos de las historias y con una buena propuesta de fantasía lograron llegar con éxito a los más chicos y muy especialmente a las niñas.
La nueva entrega se caracteriza por concentrarse a pleno en la aventura y la acción con un argumento entretenido que narra los orígenes del pirata que luego se convertirá en James Garfio. Es gracioso porque lo retratan como una especie de Anakin Skywalker que empieza siendo un aventurero bondadoso y luego derrapa para el lado oscuro.
La película presenta además a la carismática hada Zarina, quien le hubiera robado una sonrisa a Robert Louis Stevenson y Emilio Salgari, ya que se trata de la versión en miniatura de la hija del Corsario Negro.
La directora Peggy Holmes se toma literalmente los primeros diez minutos de la película para narrar el origen de este nuevo personaje que es algo rarísimo de ver en una propuesta infantil clase B de este tipo, donde no se le suele dar mucha importancia al desarrollo de los argumentos.
Estas producciones de John Lasseter (Toy Story) evidentemente engancharon a los artistas involucrados de una manera especial y eso se plasmó en la calidad de estos filmes que son muy buenos.
Una gran propuesta para entretener a los más chicos.