Una mujer y sus hijos viajan desde Argentina para asistir al casamiento de su hermana menor en un pueblo pequeño (sin nombre) de los tantos de España. No tardará Todos lo saben en desplegar la mayoría de los típicos tópicos del costumbrismo; una fiesta de bodas hasta casi lo exige, a lo que se añaden las habladurías que circulan en la vida de una comunidad en la que todos se conocen y ciertos conflictos familiares que reúnen viejas disputas y afectos. La institución familiar no es solamente una forma de codificar el afecto, también ordena y administra la riqueza y las propiedades. En la trama, una finca de viñedos suscita rencores y sospechas.