Y un día, Harry y Lloyd volvieron. Nadie esperaba volver a verlos, ya que la primera entrega es un clásico absoluto -obviemos la pútrida precuela, por favor- pero veinte años después, acá están. Lisa y llanamente, una de las mejores películas de los hermanos Bob y Peter Farrelly en años, Tonto y Retonto 2 vuelve a captar el espíritu de aquella desfachatada primera vez, con los dos amigos inseparables en camino hacia una nueva aventura.
Gracias a un disparatado gag que justifica la ausencia de estos dos personajes durante veinte años -utilizado en el trailer, pero que no pierde su vigencia en el cine- Tonto y Retonto 2 vuelve a la comedia estilo road movie, en este caso para encontrar al retoño perdido de Harry, concebido mucho tiempo atrás. Muchas de las situaciones del primer acto no funcionan porque tardan en encontrar su ritmo, pero para cuando estos idiotas comienzan su camino, la aventura será imparable. Haciendo uso de varios golpes de nostalgia -que los fanáticos reconocerán instantáneamente- los Farrelly se desempolvan a sí mismos con situaciones cómicas fantásticas, que verdaderamente entienden las motivaciones y lo cabezahuecas que pueden llegar a ser Harry y Lloyd.
Lo primero que uno puede llegar a pensar es que Tonto y Retonto 2 es una secuela que llega tarde. Todo lo contrario, es una continuación que llega justo a tiempo, ya que los protagonistas tienen sus cuerpos envejecidos pero su estado mental no ha cambiado ni un ápice. Eso mismo comprenden tanto Jim Carrey como Jeff Daniels, que se dan rienda suelta a recuperar el tiempo perdido con personajes aclamados en su filomgrafía. Por parte de Carrey, la elección es una muy obvia, ya que su carrera no ha estado teniendo el alto vuelo que tuvo en su momento, y por parte de Daniels, se nota el amor por su Harry porque tiene su carrera como actor serio asegurada -sin ir mas lejos, me remito a su excelente trabajo actual en la serie The Newsroom-. No tendrán la misma energía que en el pasado y así lo demuestra ese clip final en los créditos, que recapitula de alguna manera sus andanzas: ambos han envejecido, pero el carisma y la química están intactos. La sorpresa mayor es Carrey, cuyas morisquetas y juegos faciales todavía tienen chispa para rato.
Inesperadamente divertida y orgánica en su tratamiento de los personajes, Tonto y Retonto 2 es una genial comedia, que funcionará mejor para aquellos que crecieron viendo a Harry y a Lloyd darse de a bastonazos en smokings celestes y naranjas.