Amor por el cine
En esta nueva película de Rosendo Ruiz, Tres D, la localidad cordobesa de Cosquín y su festival de cine son el telón de fondo para la historia de Mato, un joven realizador a quien contratan para filmar y entrevistar a los directores que asisten al encuentro cinematográfico, pequeña excusa que da pie para iniciar un relato que rápidamente se convierte en una profunda reflexión sobre el cine como disciplina y oficio.
Lo que más impresiona sobre Tres D es la aparente sencillez y frescura con la que se construye un discurso que expresa una increíble preocupación por cómo pensamos y hacemos el cine en la actualidad. Las entrevistas son el puntapié para dar lugar a aquellos directores y críticos que producen al margen, protagonistas de un circuito off poco conocido y mostrado fuera del mundo de los festivales, entre los que se encuentran José Celestino Campusano, Germán Scelso y Nicolás Prividera.
Junto con esta disertación -que pone a circular el film por el camino del documental- se desarrolla la historia de Mato, la cual no se pierde sino que crece, y Cosquín termina por convertirse en fondo y figura de una misma cosa: el lugar del amor, el amor por el cine.