Jason Reitman, hijo de Ivan Reitman ("Los cazafantasmas"), logra una comedia sobre la maternidad diferente de lo conocido. Esta película podría ser vista como una respuesta moderna a "Mary Poppins", empezando por el detalle de que Tully, el personaje interpretado por Mackenzie Davis, es algo así como la niñera perfecta. Pero, a pesar de lo que señala el título, la protagonista no es Tully sino Marlo (Charlize Theron), quien a pesar de tener ya varios chicos está nuevamente embarazada y aun así se niega a contratar una niñera. Los gags sobre la vida imposible de esta madre abnegada conforman algunas de las mejores partes de esta película que, poco a poco, va cambiando el tono cuando ante el desastre inminente la madraza no tiene más opción que apelar a esta niñera soñada, que le cambia la vida radicalmente y le da una nueva perspectiva de la vida.
Reitman y su antiguo colaborador, el guionista Diablo Cody, arman una comedia original que se sostiene en las dos sólidas actuaciones de actrices tan diferentes como Charlize Theroon y Mackenzie Davis, que trabajan en dos registros distintos y sin que cada una de ellas deje de lucirse a su manera.